BIBLIOLOGIA:
LA DOCTRINA DE LAS SAGRADAS ESCRITURAS
(1era parte)
“LA BIBLIA: COMO LA PALABRA DE DIOS”
Por: Yerry A. Fernández (Pastor-Maestro)
Introducción
Yo estoy completamente seguro que, si nosotros le preguntamos a la mayoría de los cristianos que nosotros tenemos alrededor en nuestras Iglesias de hoy, por nuevo en la fe que sea dicho cristiano: ¿Es la BIBLIA la palabra de Dios? Estoy seguro que todos dirían enfáticamente: ¡POR SUPUESTO QUE SÍ! Pero, si la pregunta fuera: ¿Me puedes dar razones del porqué yo debo creerte que la Biblia es la palabra de Dios? ¿Me puedes probar con argumentos convincentes de que la Biblia es la palabra de Dios? No estoy del todo seguro que las respuestas sean del todo afirmativas. Esto refleja el pobre estado en el que se encuentran nuestras iglesias y los creyentes que la forman con respecto al lugar que hemos dado al sagrado Registro divino, la Biblia, la palabra de Dios. En nuestro primer estudio de BIBLIOLOGÍA, es decir, el estudio cuidadoso y sistemático de los aspectos relacionados a la Biblia o a sus 66 libros, nuestro propósito será probar con argumentos válidos, porqué cuando nosotros nos referimos a la Biblia, nos referimos a ella como La Palabra de Dios.
La Doctrina definida
Cuando nosotros afirmamos que la Biblia es la palabra de Dios, estamos implicando muchas cosas a la vez. De una manera específica, estamos diciendo, primero, que Dios es el verdadero AUTOR de ella o Aquel que la efectuó. Estamos diciendo, segundo, que la palabra de Dios es una autoridad en los asuntos morales y espirituales (Mt. 4:4), tercero, que es confiable (Mt. 26:54), cuarto, que es perfecta (Sal. 19:7), quinto, que es suficiente (Lc. 16:31), sexto, que es eterna e indestructible (Mt. 5:17-18), séptimo, que es clara (Sal. 19:8; Lc. 24:27), y octavo, que es infalible (Sal. 19:7; Jn. 10:35).
Estamos reconociendo que en ella han sido revelados los pensamientos y las opiniones de Dios no las del hombre, por consiguiente, el hecho de que en la Biblia nosotros encontramos las palabras de Dios y no las del hombre, eso hace de la Biblia un libro confiable e inerrante, es decir, sin errores. Cuando decimos que la Biblia es la palabra de Dios, estamos diciendo que en ella nosotros tenemos todo aquello que necesitamos saber acerca de Dios, acerca del mundo alrededor, del hombre y los propósitos redentores de Dios para con los seres humanos. Y cuando decimos de la Biblia, que es la palabra de Dios, estamos diciendo que es el único libro que contiene verdades absolutas. Este libro, que nosotros regularmente llamamos la palabra de Dios no carece de información para darnos ni tampoco encontramos en ella información de sobra. Dice Juan 20:30:
“Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. Pero estas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo tengáis vida en su nombre”.
Algunas afirmaciones sobre la Biblia como La Palabra de Dios
“Incluso para un lector ocasional de la Biblia, pronto se pone de manifiesto que está leyendo un libro fuera de lo usual”.
(Lewis Sperry Chafer)
“La Biblia, en realidad debe estar “sola” en un estante prioritario. La Biblia es singular”.
(Josh Mcdowell,
Nueva Evidencia Que Demanda un Veredicto)
“Las Sagradas Escrituras conforman el libro más destacado que el mundo haya visto jamás”.
(Emery Bancroft,
Fundamentos de Teología Bíblica)
“…Jamás libro alguno ha hablado cual este Libro; su voz está llena de potencia y majestad; es la voz de Dios mismo”.
(Charles Spurgeon,
Sermón Titulado: El Libro Vivo)
“Si este libro no hubiera sido El Libro de Dios, los hombres lo habría destruido ya hace tiempo”
(H. L. Hastings, Citado por JoshMcdowell,
Nueva Evidencia Que Demanda Un Veredicto, Pág. 12)
“La palabra contenida en estos libros procede de Dios y recibe su autoridad solamente de ÉL y no de los hombres”.
(Confesión de Fe de Francia del 1559,
Citado por: James Leo Garrett, pág. 171, Tomo 1)
“La autoridad de la Santa Escritura, por la que ésta debe ser creída, no depende del testimonio de ningún hombre o Iglesia Gá. 1:8-9; Ef. 2:20, sino enteramente de Dios (quien es la verdad misma), el autor de ella; por tanto, debe ser recibida porque es la palabra de Dios 2 Ti. 3:15; Ro. 1:2; Gá. 3:8; Ro. 15:4; Jn. 10:35”.
(Confesión de Fe Bautista de Londres del 1689,
Párrafo No. 4, pág. 30)
Evidencia Interna de la Biblia como La Palabra de Dios
Antiguo Testamento
“Habló Jehová a Moisés, diciendo: habla a la congregación de los hijos de Israel y diles…” (Lev. 19:1-2).
“Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu mano, y como frontales entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas” (Dt. 6:6-9).
“Palabra de Jehová que vino a Jeremías…” (Jer. 34:1).
“Por tanto, Jehová el Señor dice así…” (Is. 28:16).
“Así ha dicho Jehová el Señor…” (Ez. 5:5).
“Vino a mí palabra de Jehová, diciendo…” (Ez. 7:1).
“Vino palabra de Jehová a Jonás hijo de Amitai, diciendo…” (Jon. 1:1).
Nuevo Testamento
Las afirmaciones de Jesús y sus Apóstoles
“No penséis que he venido a abrogar la ley o los profetas; no he venido a abrogar sino par cumplir” (Mt. 5:17).
“El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” (Mr. 13:31).
“Así que la fe viene por el oír, y el oír por la palabra de Dios” (Ro. 10:17).
“La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros…” (Col. 3:16).
“Por lo cual nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como la palabra de hombres, sino según es en verdad la palabra de Dios, la cual actúa en vosotros los creyentes” (1 Tes. 2:13).
“Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea enteramente preparado para toda buena obra” (2 Ti. 3:16-17).
“Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre…Mas la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada” (I P. 1:23-25).
El hecho de que estos autores hayan afirmado en sus cartas y en sus mensajes al pueblo de Dios que venían en Su nombre y no con palabras o exhortaciones personales, nos deja bien en claro que la Biblia de principio a fin es la palabra de Dios. Podemos ver que todos los hombres de Dios que hablaron en el AT, en el nombre de Dios lo hicieron y no de su propia cuenta, el mensaje que recibieron, de DIOS lo recibieron, las palabras que pronunciaron, en nombre de Dios la pronunciaron. Estas son evidencias que hablan fuertemente de la Biblia escrita como la palabra de Dios.
Pero debemos reconocer que estas evidencias podrían no ser suficientes para nosotros poder convencer la mente de un escéptico, de alguien que tenga prejuicios con respecto a la palabra de Dios, la Biblia. Por tanto, existen evidencias externas que nos hablan de lo sobrenatural de este Libro.
Evidencias externas de la Biblia como La Palabra de Dios
- La Biblia: Única en Su Continuidad. Cuando hablamos de la continuidad de la Biblia, hablamos del hecho de que a pesar del largo período en el que fue escrita y por hombres que en la mayoría de los casos no se conocieron, no obstante escribieron en una forma lógica, cronológicamente progresiva, ordenada y uniforme a tal punto, que un evento sigue al otro en su debido orden. Por obligación debemos llegar a la conclusión de que este libro no es producto del ingenio humano, sino de un Dios que ha venido desarrollando la historia para sus propios propósitos y gloria. Tiene que tratarse de algo divino.
Lewis Chafer comenta: “Uno de los más sorprendentes y extraordinarios hechos respecto a las Escrituras, es que, aunque fueron escritas por más de cuarenta autores distintos que vivieron a lo largo de un período de más de 1,600 años, la Biblia es, no obstante, un Libro y no una simple colección de 66 libros. Sus autores proceden de los más diversos lugares y situaciones de la vida; hay reyes, campesinos, filósofos, hombres de Estado, pescadores, médicos, eruditos, poetas y agricultores. Vivieron en diferentes experiencias existenciales, y con frecuencia fueron completamente distintos en carácter. La Biblia tiene una continuidad que puede ser observada desde el Génesis hasta el Apocalipsis”. (Lewis Sperry Chafer, 52 Doctrinas de la Biblia, pág. 12)
Para demostrar el milagro de la continuidad de BIBLIA como la palabra de Dios, el comentarista y apologista Josh Mcdowell lo describe de la siguiente manera:
Capacidad del escritor bíblico:
v Moisés: un líder político y juez, educado en las universidades de Egipto.
v David: un rey, poeta, músico, pastor de ovejas y guerrero.
v Amós: pastor de animales.
v Josué: un general militar.
v Nehemías: un copero para un rey pagano.
v Daniel: un primer ministro.
v Salomón: un rey y filósofo.
v Lucas: médico e historiador.
v Pedro: pescador
v Pablo: un rabino
v Marcos: secretario de Pedro
Redactado en diferentes lugares
v Moisés: en el desierto
v Jeremías: en un calabozo
v Daniel: en la falda de una montaña y en un palacio
v Pablo: dentro de las paredes de una cárcel
v Lucas: mientras viajaba
v Juan: mientras estaba desterrado en Patmos
Escrito en diferentes tiempos
v David: en tiempos de guerra y sacrificio
v Salomón: en tiempos de paz y prosperidad
Redactado durante diferentes estados de ánimo:
v Algunos redactores reflejan cumbres de gozo.
v Otros escriben desde las profundidades del dolor y la desesperación
v Algunos escriben durante momentos de certeza y de convicción
v Otros escriben durante días de confusión y duda
(Nueva Evidencia Que Demanda un Veredicto,
Josh Mcdowell, pág. 4-5)
- La Biblia: Única en Su Circulación. Ningún libro en la historia de la humanidad se ha distribuido tanto en tantos lugares como la Biblia, la palabra de Dios. Muchos autores han logrado vender muchos libros, incluso millones de libros. Pero, al hablar de la Biblia como libro, hablamos de miles de millones de Biblias vendidas y ejemplares del Nuevo Testamento. Según un informe dado por las Sociedades Bíblicas Unidas para 1998, en ese sólo año, esa organización distribuyó mas de 20.8 millones de Biblias completas y más de 20.1 millones de ejemplares del Nuevo Testamento. (Estadísticas citadas por: Josh Mcdowell, Evidencia que demanda un veredicto, pág. 8-9)
- La Biblia: Única en Su Traducción. Otras de las estadísticas impresionantes de la Biblia como la palabra de Dios, es el número de idiomas a los que ha sido traducida. Estamos hablando de un número impresionante que una vez más demuestra el aspecto Divino de este Libro singular; que ha podido despertar tanto interés en tanta gente diferente. La Biblia o porciones de ella ha sido traducida a más de 2.200 idiomas. Aunque este número representa sólo un tercio de los 6.500 idiomas que tenemos como conocidos en el mundo, a través de estos 2.200 idiomas se han podido alcanzar comunicación del 90% de la población mundial. (Estadísticas de la Biblesociety.org, Citado por Josh Mcdowell, Evidencia que demanda un Veredicto, pág. 9). En comparación con la Biblia, otros libros sólo han alcanzado uno 15 ó 20 idiomas de traducción, lo que indica que ningún libro ha despertado en el hombre más interés que la Biblia, la palabra de Dios.
- La Biblia: Única en Su Supervivencia. Otros de los aspectos impresionantes de la Biblia como la palabra de Dios, es el hecho de cómo ha podido permanecer intacta hasta hoy. Es evidente que Dios mismo se ha encargado de mantenerla intacta. “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” (Mr. 13:31).
No ha muerto con el tiempo
Sorprendido ante esta realidad, el pastor Charles Spurgeon escribió:
“LA PALABRA DE DIOS ES VIVA. Un libro muerto está mudo, y un libro mudo no puede hablar. ¡Cuántos libros humanos han muerto, hace mucho tiempo ya! Ha bastado el curso del tiempo para quitarles el valor; ningún interés ofrecen y sus enseñanzas a nadie convencen. Enterradles, si queréis, pues no hacen vibrar ningún alma humana, ni despiertan calor en el corazón de ningún hombre”. (Charles Spurgeon. Sermón Titulado: El Libro Vivo)
Josh Mcdowell escribe:
“Aunque fueron escritas sobre materiales perecederos y que era necesario copiarlas a mano por cientos de años, antes de la invención de la prensa de tipos móviles, las Escrituras nunca han perdido ni su estilo ni su exactitud, ni nunca han llegado a ser aniquiladas” (Josh Mcdowell, Nueva Evidencia Que Demanda Un Veredicto, Pág. 10).
La pregunta que nos hacemos comúnmente es: ¿Cómo ha sido eso posible? Evidentemente el factor divino aquí no podemos olvidarlo; Dios se ha encargado que su palabra permanezca y permanezca para siempre. Pero, por otro lado, tenemos el hecho de que los judíos, el pueblo de Dios, se han encargado de preservar estos manuscritos con fidelidad sin igual.
Bernard Ramm escribe:
“Los judíos preservaron estos manuscritos como ningunos otros….vigilaron todo detalle: letras, sílabas, palabras, párrafos. Mantenían a cierta clase de hombres dentro de su cultura cuya responsabilidad era la de preservar y transmitir estos documentos con una fidelidad que prácticamente era perfecta; estos eran los escribas, los doctores de la ley, los masoretas. ¿Quién ha contado las letras, las sílabas o las palabras de Platón o de Aristóteles?
(Bernard Ramm, Citado por Josh Mcdowell,
Nueva Evidencia Que Demanda un Veredecito, pág. 10-11)
No ha muerto con la persecución
A través de los siglos, se han levantado ataques en diferentes partes del mundo para destruir por completo todo rastro de Biblia que haya en el mundo. El emperador Diocleciano en el año 303 d. C proclamó un edicto con el propósito de detener la adoración de los cristianos al DIOS verdadero y destruir las Biblias que leían regularmente. Una carta imperial fue promulgada para que en todas partes mandando todos los templos fueran destruidos y las Escrituras quemadas. El historiador Eusebio luego narra, de una manera extraña y especial, que 25 años después del edicto de Diocleciano, el emperador Constantino promulgó otro edicto que daba el permiso para que 50 copias de la Biblia fueran elaboradas por parte del gobierno.
En sus años de vida, se dice del filósofo francés y escéptico Voltaire, que declaró que en 100 años el cristianismo sería arrasado y pasaría a ser pura historia. Y no sólo eso, sino que se cuenta que 50 años después de la muerte de Voltaire la Sociedad Bíblica de Ginebra utilizó la prensa de Voltaire y su casa para producir Biblias.
“Los enemigos de la Biblia van y vienen. Pero la Biblia permanece”, dice Mcdowell. (Información extraída de Nueva Evidencia que Demanda Un veredicto, Josh Mcdowell, pág. 11-12)
No ha muerto a pesar de la Alta Crítica
Por más de 1800 años la Biblia ha estado bajo el ataque crítico del hombre, pero hoy se encuentra muy sólida y fascinante como siempre lo ha sido. No ha habido libro en la historia que haya causado tanto revuelo en la mente humana como El Libro de Dios, La Biblia. Dentro de los ataques relativamente recientes que podemos recordar en contra de la Biblia está: el evangelio de Judas, el código Da Vinchi, el evangelio de Maria Magdalena, entre muchos otros más.
Con mucha sabiduría, Bernard Ramm escribe:
“Más de mil veces, el toque de difunto ha sonado para la Biblia, el cortejo fúnebre se ha formado, la inscripción grabada para la lápida, el servicio de entierro redactado. Pero ¡el cadáver no se queda en el ataúd! Ningún otro libro ha sido tan picado, tan acuchillado, tan escudriñado, tan difamado…pero la millones de personas todavía la Biblia, la leen y la estudian”. (Citado por: Josh Modowell, Nueva Evidencia Que Demanda Un Veredicto, pág. 12).
- La Biblia: Única en Su Contenido y en Sus Enseñanzas. La Biblia ocupa un lugar único y especial dentro del campo de la enseñanza, así piensan aquellos que hemos nacido de nuevo en Cristo. Ningún libro escrito puede equipararse con la Biblia en cuanto a contenido se refiere. La Biblia presenta como contenido principal y único los eventos proféticos, los eventos históricos y los eventos futuros de mayor trascendencia para la humanidad, y el foco principal y único de esa historia, de las profecías y tiempos futuros es Jesucristo. aunque la humanidad se rehúse a reconocerlo así. En la Biblia encontramos los pensamientos de Dios no los del hombre.
Dice Lewis Sperry Chafer:
“En las profecías bíblicas se manifiesta la totalidad del programa divino para el mundo, para Israel, y para su Iglesia, culminando en esta última, que es eterna”. (Lewis Sperry Chafer; Grandes Temas Bíblicos, Pág. 14).
Lewis Sperry Chafer dice:
“La Biblia no es un libro que algún hombre escribiría, si pudiera; ni es un libro que el hombre podría escribir si quisiera”. (Citado por Josh Mcdowell, Evidencia Que Demanda Un Veredicto)
Dice Josh Mcdowell:
“La Biblia trata con franqueza los pecados de sus protagonistas, aun cuando esos pecados son un mal reflejo del pueblo de Dios, sus líderes o aun los escritores bíblicos mismos”. (Josh Mcdowell, Evidencia Que Demanda Un Veredicto, Pág. 15)
- La Biblia: Única como literatura. Esta es otra de las áreas en las que la Biblia no tiene paralelo. La Biblia como literatura no sólo es un superior en cuanto a la variedad de sus temas: poesía, dramas, narrativas de guerra, relatos de amor, historia, geografía, leyes, etc., sino que ha sido el libro que más impacto causado y más influencia a tenido en otras literaturas, a tal punto que alguien escribió:
“Si todas las Biblias en alguna ciudad principal fueran destruidas, el Libro podría ser reconstruido en todas sus partes esenciales usando las citas que están en libros publicados y que están en la biblioteca de la ciudad”. (Cleland McAfee, The Greatest English Classic. Citado por Josh Mcdowell, Evidencia Que Demanda Un Veredicto, Pág. 15)
- La Biblia: Única en influencia sobre la raza humana. Ningún libro en la historia de la humanidad ha ejercido tanta influencia en la vida de las personas como la Biblia, ningún libro ha cambiado tantas mentes y corazones en la historia de la humanidad, como la Biblia, la palabra de Dios. Ningún programa de auto-ayuda, o de hogar-crea, o programas de rehabilitación ha hecho más en los músculos espirituales y morales de los seres humanos como este Libro. Millones de homosexuales transformados, drogadictos regenerados, asesinos y prostitutas convertidas fielmente al cristianismo bíblico. Sólo el Libro de Dios lo puede hacer!!!! La educación de la Biblia es superior a la educación que cualquier otro libro pueda ofrecer, su enseñanza es más saludable que cualquier otro libro y de más impacto para el corazón humano. El salmista David escribió:
“La ley de Jehová es perfecta que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo” (Sal. 19:7).
Theodore Roosevelt dijo:
“Un conocimiento profundo de la Biblia vale más que una educación universitaria” (Citado por: Josh Mcdowell, Nueva Evidencia Que Demanda Un Veredicto)
Preparado por Yerry Alexander Fernández (Pastor-Maestro) de La Primera Iglesia Bautista de Jayaco. A los estudiantes del Instituto De Estudios Teológicos “didaskalia”. Sesión de los sábados de 9:00 a. m. a 11:00 a. m.
Bibliografía y Obras Consultadas: Nueva Evidencia Que Demanda Un Veredicto por Josh Mcdowell, Teología Sistemática por James Leo Garrett, Grandes Temas Bíblicos por Lewis Sperry Chafer y John Walvoord, Fundamentos de Teología Bíblica por Emery H. Bancroft, Apologética por Norman Geisler-Ron Brooks, La Confesión de Fe de Londres de 1689, Sermón: El Libro Vivo por: Charles Spurgeon.
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